En este módulo vamos a trabajar en este módulo de análisis transaccional, que está estrechamente relacionado con las emociones. El análisis transaccional nos ayuda a comprender nuestras emociones y su interacción con los tres estados que tenemos: el estado del niño, el estado adulto y el estado padre.
El estado niño representa aquella conexión con el pasado, donde muchas veces encontramos dolor. Es fundamental poder reconciliarnos con nuestro niño interior, sanarlo y tomar decisiones conscientes. Las constelaciones familiares nos enseñan la importancia de decidir y renunciar a todas las emociones que nos atrapan en el pasado. Renunciar a buscar explicaciones, a querer entender lo que sucedió, a tratar de compensar o reparar situaciones que ya no podemos cambiar.
Muchas veces pasamos la vida esperando una explicación de quienes estuvieron en nuestro pasado, como un padre ausente, deseando entender por qué nos abandonó. Sin embargo, es esencial renunciar a esta espera y abrirnos a la vida tal como es, sin intentar cambiar lo que ya ocurrió. Este paso es crucial para sanar nuestras emociones y poder mirar con aceptación a nuestro niño interior.
Abrirnos a la vida nos permite vivir en plenitud, dejando atrás el sufrimiento y el estancamiento en el pasado. Integrar lo vivido como parte de nuestra historia y aprender de ello nos ayuda a evolucionar. Al hacerlo, podemos fortalecer nuestra identidad y avanzar con una nueva perspectiva.
Este módulo nos guiará en este proceso, explorando cada aspecto de la transacción emocional que ocurre en nuestra vida cotidiana.
